Janucá y las Mujeres

Una de estas historias sobre Janucá y las mujeres se llama “La Historia de la Madre" mencionada en el Libro de los Macabeos. Nuestros rabinos han identificado esta mujer como "Janah." En esta historia el malvado rey Antíoco arresta a Janah y sus siete hijos que se niegan a comer cerdo en público. Son detenidos y llevados ante él a juicio. Se les ofrece una oportunidad más para salvarse a sí mismos, al participar en la alimentación del cerdo que había sido un sacrificio a un ídolo. Cada hijo se niega a comer del cerdo y es torturado en presencia de su madre y condenados a muerte. El Rey inventa muchas maneras de tratar de convencerlos, pero cada uno de ellos se niega participar en este pecado. 

En cada caso la madre instruye y anima a cada uno de sus hijos para que observen la ley judía en contra de participar en la adoración de ídolos. Sabiendo que les costaría la vida a sus hijos ella los convence que acepten la muerte en lugar de violar la Torá. Cada uno de ellos fue asesinado delante de ella. Al final de la historia, el último hijo (el más joven) fue llevado ante el Rey. El trató de negociar con Janah para que ella permitiera que este último hijo participara en la adoración de ídolos. Pero ella no se prestó para esto. Luego le pide a su hijo delante del rey lo que quiere hacer y su hijo responde que su único pesar es que tuvo que esperar tanto tiempo para sacrificar su vida por Dios y su Torá. Janah luego lo elogia y el es martirizado. 


Cuando se lo llevaron a morir le dijo a su hijo que cuando llegue al cielo, le debe decir al Padre Abraham que a pesar de que él estaba dispuesto a sacrificar un solo hijo, que ella había sacrificado siete hijos por el bien del nombre divino. Para torturarla más el Rey decidió dejarla a ella viva aunque no había aceptado los mandamientos del rey. De acuerdo a uno de las versiones de la historia ella se suicidó al tirarse de los muros de la ciudad y otra versión dice que ella murió por su tristeza y dolor durante sus oraciones. Este evento fue lo que motivó que más hombres judíos se unan a la causa de los Macabeos y arriesgaran sus vidas para luchar contra sus opresores.


Hubo otra historia que también motivó al público que ocurrió en realidad muchos años antes y se llevó a cabo durante el asalto asirio en Jerusalén. Esta historia llamada la historia de “Judit” también inspiró a los Macabeos. Otros dicen que Judit era la hija de Matatías, el sumo sacerdote y el padre de la dinastía de los Hasmoneos. La historia apócrifa en el Libro de Judit es de Judit, una mujer judía que mató a la Holofernes el general. Nadie tiene certeza de cómo la historia de Judit quedó vinculada a la historia de Janucá porque de acuerdo a los libros apócrifos ella vivió siglos antes, durante el reinado de Nabucodonosor, rey de Asiria. Su historia podría haber sido escrito durante la época de los Macabeos para darles valor a los judíos rebeldes. En última instancia, su historia se incorporó a la tradición rabínica, cambiando a los asirios por los Sirios, los cuales lucharon contra los Macabeos. 


En la historia original, cuando el comandante en jefe de Nabucodonosor, Holofernes, estaba en la misión de conquistar Judea lanza una batalla para conquistar a la ciudad de Betulia, posiblemente Jerusalén. Durante esta batalla extendida y terrible los ciudadanos judíos ya estaban dispuestos a rendirse, cuando una viuda muy hermosa, llamada Judit anuncia un plan para salvarlos.Judit va al campamento del general, adonde en una audiencia privada con Holofernes ella lo convence que ella, rezándole a su Dios, le puede ayudar a conquistar Judea. Ella se queda con él durante tres días, dejándolo cada noche a orar, y creando entre los guardias del campo un falso sentido de seguridad. En el cuarto día, Holofernes invita a Judit a un banquete especial privado donde el tenia planes de seducirla. Judit lo alimenta con queso salado para que Holofernes este sediento. En lugar de darle agua le da vino fuerte y muy pronto él ya estaba borracho y dormido. Mientras duerme, Judit tomó su espada y le cortó la cabeza. Cuando el ejército ve la cabeza decapitada de su general, se asustaron y huyeron en retirada. Ellos consideraban a Holofernes el dios personificado de la guerra. Ella y su doncella salieron del campamento con la cabeza de Holofernes en un saco, y se la mostraron al pueblo judío. Israel tuvo una gran victoria y Judit lleva a la gente bailando y cantando alabanzas a Dios por vencerle al enemigo "por la mano de una mujer." (Judit 16:6)


En la versión de esta historia que tiene que ver con Janucá, los griegos de Siria habían promulgado un decreto que las mujeres judías eran obligadas a someterse a un soldado griego de alto rango antes de su boda. Judit fingió aceptar esta situación y se ofreció a someterse a este por su propia voluntad. A continuación, aprovechó la oportunidad para matarlo y poner la cabeza en su bolsa cuando se fue. La cabeza del soldado fue colgada en las paredes de Jerusalén. Y esto motivo a los macabeos y creó gran miedo entre los enemigos.


En honor a la valentía de Judit, las mujeres deben abstenerse de trabajar en Janucá, mientras que las velas están ardiendo. Otra costumbre es comer los productos lácteos porque ella le dio el queso salado al general antes de que ella lo matara. Ha habido algunas ilustraciones muy sangrientas de Judit que la dibujan llevando a la cabeza de Holofernes en la mano o arrastrándola. Hay incluso una Menorá clásica con esto como parte de su decoración.Estas historias de heroísmo arrojan luz sobre el papel de la mujer judía en tiempos de crisis. 


Las historias de Janucá no son la excepción a la regla. En los tiempos modernos vemos que las mujeres judías toman roles de liderazgo en el ejército moderno de Israel como instructores y especialistas. Sus talentos nos han traído a través de muchas crisis y sus dones deben de ser reconocidos no sólo sobre una base diaria para la bendición de la supervivencia heroica, pero también como parte de la resistencia judía y el éxito en la batalla.

Este artículo ha sido dedicado en honor de Annabelle Tam, miembro de mi congregación en el golá (exilio), Yonkers N.Y. que se fue de un lugar que no es sagrado para unirse a los rangos de los sagrados defendiendo a nuestro pueblo de crueles enemigos.


 


Este Janucá le damos un saludo y una oración especial, en nombre de nuestras valientes mujeres que sirven en los rangos sagrados de las Fuerzas de Defenzas de Israel para proteger nuentra tierra y nuestro pueblo, otorgándole gran honor a todos los judíos del mundo. 

Hazak Ubaruj!!! Estamos muy orgullosos de ustedes!!! Qué Hashem los proteja hoy, mañana y siempre!!!

Les deseamos Jag Urim Sameaj de parte del Rabino y la Rabanit Viñas

*Nota: Este artículo ha sido traducido del Inglés al Español directamnete del Blog del Rabino Viñas en Times of Israel: http://blogs.timesofisrael.com/jewish-women-soldiers-chanukah/

Comentarios

  1. Admirable. La mujer judia fue y sigue siendo un eslabón importante no solo de la familia sino para la humanidad. Que HASHEM bendiga a todas las mujeres judías y aquellas que siguen sus pasos.

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